La visa E-1 de importación y exportación es una visa que permite a los empresarios y trabajadores extranjeros de ciertos países vivir y trabajar en los Estados Unidos. Este tipo de visa es ideal para aquellas personas que están involucradas en intercambios comerciales entre su país de origen y los Estados Unidos.
Hoy hablaremos de un caso de éxito de un cliente de Hawks Villafranca Law, él es Diego, quien es parte de una empresa mexicana dedicada a la implementación de software especializado, enfocado en los productos de la marca Salesforce y tecnologías relacionadas. Durante 10 años, su empresa se enfocó en el mercado mexicano, trabajando con clientes locales. Sin embargo, vieron la oportunidad de expandir su negocio y diversificar sus ingresos a través de la captación de clientes internacionales, especialmente en los Estados Unidos.
Con el objetivo de acelerar su crecimiento y tener una presencia directiva en los Estados Unidos, decidieron solicitar la visa E-1. Esta visa les permitió realizar intercambios de servicios entre su empresa en México y clientes en los Estados Unidos. A través de esta transacción, lograron establecer una relación contractual y de servicios entre su empresa mexicana y la empresa estadounidense, lo cual fue fundamental para el éxito de su solicitud de visa.
Uno de los aspectos más preocupantes para Diego fue asegurarse de hacer las cosas de manera correcta y legal. Quería evitar problemas legales en el futuro y asegurarse de obtener la visa adecuada. Además, también consideró aspectos como el traslado de su familia y cómo podrían adaptarse a vivir en los Estados Unidos mientras él atendía a los clientes y hacía crecer el negocio.
El proceso de solicitud de la visa E-1 implicó trabajar de cerca con nuestro despacho de abogados. En la consulta inicial, se evaluaron todas las opciones disponibles y se determinó cuál sería la mejor alternativa para Diego, considerando sus metas, la naturaleza de su negocio y las necesidades de su familia. La confianza generada y la recomendación previa de un amigo que había obtenido éxito con nuestro despacho fueron factores clave para que Diego decidiera trabajar con nosotros.
Durante el proceso de solicitud, fue importante entender las variables que las autoridades evaluarían al decidir si el caso sería aprobado o no. En este sentido, se enfocaron en demostrar la transaccionalidad existente entre las entidades de ambos países, respaldada por ventas y servicios relacionados con su negocio. Para ello, se recopiló y organizó la información necesaria, lo cual tomó varios meses de trabajo conjunto.
La entrevista en el consulado de Monterrey fue rápida y menos profunda de lo que esperaban. Aunque llevaron toda la documentación preparada, no fue necesario utilizarla. En el consulado, realizaron la entrevista en las filas de las ventanillas, donde varios cónsules evaluaban las solicitudes de visas. A pesar de esto, el proceso fue exitoso y Diego logró obtener la visa E-1.
En conclusión, el caso de éxito de Diego con la visa E-1 de importación y exportación demuestra cómo este programa de inmigración puede beneficiar a empresarios y trabajadores extranjeros que están involucrados en intercambios comerciales entre su país de origen y los Estados Unidos. Siguiendo un proceso adecuado, trabajando de cerca con un despacho de abogados especializado y demostrando la transaccionalidad de los servicios, es posible obtener esta visa y expandir el negocio en los Estados Unidos.